El escucha imaginario

Escucha imaginario, chica imantada

chica imantada, esucha imaginario

un placer en conocerte

el placer es mío.

que haces?

perderme en mi miseria , otra vez

no hay otro mejor lugar para estar sola?

no , pero tu no existes, esto nunca sucedió

Y así la chica imantada se sentó recargada sobre aquella pared, confiándole (una vez más) sus secretos y tristezas a la tierra, a la lluvia, al sol, a la brisa y sobre todo a si misma (su único y verdadero escucha...)

(Así, ocultando la cara entre sus manos, trata de decirse a si misma que todo estará bien )

Una y otra (y otra) vez.